Por: José Armando Polanco P.
.- La renuncia de Francisco Javier García como coordinador general de la campaña presidencial de Abel Martínez, más la aceptable excusa de Danilo Medina para asumir el puesto por su condición de salud, no es nada bueno para la candidatura Martínez.
Si a esto se le suman las declaraciones del secretario general del PLD, Charle Mariotti, de que los peledeístas prefieren a otro y no a Abel como candidato, podría observarse que la militancia de esa organización entró en una espiral del silencio.
En términos más llanos a Abel lo soltaron en banda. Para la logia de Los Alcarrizos, esto es cuando a una chichigua (cometa) está bien encampanada y se le corta el hilo; va sin rumbo… perdida en el espacio. Eso es darle banda.
Ante situación, en términos prácticos, sería una pérdida de recursos y esfuerzos en un candidato que no cuenta con el respaldo de su partido. Con senadores, diputados, síndicos y regidores suficientes el PLD pude mantener su posición en el ecosistema político dominicano.
Especialmente si el voto es preferencial en el 2024, es decir, que cada uno tendrá que rascarse con sus propias uñas, apoyarse en un candidato como Abel, cada vez con menos posibilidades, sería correr con la misma suerte. Las declaraciones de Francisco, Danilo y Charlie le cortaron el hilo a la chichigua de Abel. También podría ser un daño colateral de su propia sombra.