Nueva York, EEUU.- La viruela del mono es una rara enfermedad zoonótica producida por un virus endémico de África central y occidental que se origina en animales salvajes, como roedores y primates y ocasionalmente salta a los humanos.
La mayoría de los pacientes contagiados solo experimentan fiebre, dolores corporales, escalofríos y fatiga. Las personas con enfermedades más graves pueden desarrollar sarpullido y lesiones en la cara y las manos que pueden extenderse a otras partes del cuerpo.
El período de incubación es aproximadamente de entre cinco días a tres semanas. La mayoría de las personas se recuperan aproximadamente entre dos y cuatro semanas sin necesidad de hospitalización, pero la viruela del mono puede ser mortal en uno de cada 10 casos, y se cree que es más grave en los niños.
¿Qué tratamientos existen contra la enfermedad?
En este momento, no hay tratamientos específicos disponibles para la infección por viruela del simio, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Las personas expuestas al virus a menudo reciben una de varias vacunas contra la viruela que han demostrado ser efectivas contra la viruela del mono.
¿Cómo se propaga?
La viruela del mono puede transmitirse a través del contacto cercano con personas infectadas, sus fluidos corporales y su ropa o sábanas.
La enfermedad fue identificada por primera vez por científicos en 1958 cuando hubo dos brotes de una enfermedad «similar a la viruela» en monos de investigación, de ahí el nombre de «viruela del mono».
La primera infección humana conocida fue en 1970, en un niño de 9 años en una parte remota del Congo en cuyo hogar a veces comían mono. La investigación demostró que el niño era el único de la familia que no había sido vacunado contra la viruela humana.