Puerto Rico.- Cientos de miles de puertorriqueños tomaron las calles de la isla durante la jornada del lunes para exigir la renuncia inmediata de Ricardo Rosselló, gobernador de Puerto Rico, involucrado en un escándalo tras filtrarse una serie de conversaciones con miembros de su círculo más cercano que incluyen insultos a rivales políticos, a minorías y burlas a la población.
La manifestación en la capital San Juan ocurre un día después de que Rosselló declaró que no renunciaría al cargo, aunque prometió que no buscará reelegirse ni seguir al frente de su partido político. “He cometido errores y me he disculpado”, expresó el funcionario.
Sus declaraciones solo causaron más indignación entre sus críticos, que llevan más de una semana protagonizando protestas callejeras.
“El Nuevo Día”, el diario de mayor circulación en la isla, se sumó a la presión titulando su noticia principal: “Gobernador, es hora de escuchar a la gente: tiene que renunciar”.
La presión para que Rosselló renuncie ha ido creciendo conforme las filas de los que pedían su marcha iba incluyendo a las superestrellas puertorriqueñas de la música Ricky Martin, Bad Bunny y Residente, así como una serie de políticos estadounidenses, incluyendo congresistas de ambos partidos, varios aspirantes a la candidatura demócrata a la presidencia y la representante sin voto de Puerto Rico en el Congreso.
Rosselló fue elegido gobernador en noviembre de 2016 con casi el 50% de los votos, y ya había anunciado sus planes de buscar un segundo mandato.