Distrito Nacional, RD.- La decisión del Gobierno de no transferir al consumidor final las alzas que registran los precios de los combustibles ha provocado un aumento de la deuda con los importadores de hidrocarburos de tres mil 200 millones de pesos.
Así lo precisa el economista Antonio Ciriaco, quien señalo que «congelar los precios de los combustibles cada semana, le representa al Gobierno un subsidio de más de 200 millones de pesos, lo que ha elevado su deuda con los importadores a unos tres mil 200 millones «.
Asegura que la situación es insostenible en el tiempo ya que comprometen las finanzas públicas. Es por lo que entiende que tarde o temprano las autoridades deberán traspasar los incrementos que registran los carburantes al consumidor final.